domingo, 26 de diciembre de 2010

Los amantes de Medem



Los amantes del círculo polar da la vuelta, redonda y completa, a un instante: la aparición del rostro de Otto reflejado en los ojos de Ana. En los ojos sin vida de Ana. Como otros personajes masculinos del cine de Medem – quizás siendo el ejemplo más claro Ángel en Tierra – Otto tiene una fuerte tendencia a la fabulación emocional, y cree en el amor eterno quizás básicamente para sentir que contradice las teorías de su padre (“todo nace y muere”), frase que pretende justificar el divorcio con su madre. Por su lado, Ana tiene una profunda fe en las casualidades, hasta el punto que es capaz de forzar su vida para que encaje de acuerdo con lo que le exige su destino. Así pues, los dos amantes capicúas y hermanados han convertido su vida en una sucesión de coincidencias - no en vano, las tramas de Medem tienden a excluir la lógica causal y a potenciar, en cambio, los mecanismos del azar - y su amor en lo más grande y secreto surgido de ellas, jugando a lo largo del film con el tiempo y el espacio, solapando ensoñación y realidad. Al margen de las peripecias narrativas que acarrea la (no)consolidación de ambos, la unión entre Otto y Ana se presenta como el estadio superior al que pueden aspirar los protagonistas, teñida de un cierto trasfondo romántico y mitológico, pues se plantea en tanto que unión de gemelos metafóricos, es decir, de personajes que a través de su compenetración acaban resolviéndose como iguales. Por otro lado, el director hace una propuesta del amor como algo transitorio pero existente, solo inusualmente geométrico o perfecto – y por qué no, maravillosamente infantil – como fruto de la casualidad, de la cual se extrae la eternidad del mismo, así como la eternidad absoluta y final: el rostro vivo de Otto reflejado en los ojos húmedos y moribundos de Ana. Así pues, el destino irrumpe de pronto en el juego del azar sorprendiendo a los protagonistas, congelando su afecto y su trayectoria, siendo la muerte de Ana un infortunio más, el último y fatal, de esas desventuras que la pareja ha recordado en off a lo largo de la película bajo el signo de un existencialismo trágico y supersticioso.

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Fragmento de "La muerte temprana. Un recorrido por jóvenes personajes trágicos".
Trabajo final para la asignatura Tendències del Cinema Contemporani, impartida por Iván Pintor en la UPF. Junio 2009.

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